Testimonio del II Encuentro Regional de Jóvenes en Barcelona

JESÚS EN LAS CALLES DE BARCELONA

El pasado fin de semana se llevó a cabo en Barcelona el II Encuentro Regional de Jóvenes de la Renovación Carismática de Cataluña, en el que participamos más de 35 jóvenes y adolescentes de Reus, Tarragona, Rubí y Barcelona. Fue un encuentro de formación y misión, dos de los pilares del Ministerio de Jóvenes. Tuvimos formaciones en las que recordamos (y los nuevos conocieron) que somos centinelas, seguidores y discípulos de Cristo que anuncian que Él ha resucitado, y aprendimos también cómo debemos ser con nosotros mismos y con los demás. Estas formaciones fueron acompañadas de dinámicas en las cuales el Señor se derramó con gracia y poder e hizo maravillas; abrió nuestros corazones y pudimos tener una experiencia de amor fraterno con Él, que se pudo vivir de manera más íntima e intensa en una adoración.

Durante la tarde del sábado, nos preparamos para la Misión que se llevó a cabo en el centro comercial Las Arenas, en Barcelona. Divididos por grupos, los más jóvenes repartimos unos flyers anunciando que algo grande iba a pasar, y a pesar de las amenazas y la presencia policial en los centros comerciales y las afueras, no abandonamos; pudimos mantenernos firmes, aun con miedo y escuchando las críticas externas, para proclamar a Cristo y que la gente tuviera un encuentro con Él: Cristo salía a la calle durante un momento para mirar a la gente y que la gente lo mirara, para tener ese cruce de miradas. Queríamos llevar a Cristo en la vigilia de la Misericordia, para que todos experimentaran a Dios, y que Él se derramara en sus corazones y cambiara sus vidas, como ha hecho con nosotros. Todo esto lo hicimos respaldados por nuestro párroco, P. Xavier, de la parroquia Mare de Déu de la Medalla Miraculosa, y por gente y grupos de la misma.

Una vez allí, pudimos armar lío, como dice nuestro Papa Francisco, y que el mismo Jesús se hiciera presente en las calles de Barcelona. En aquel momento, estábamos en tierra sagrada: no se oía el tráfico, ni la gente alrededor; solo estaba el Señor, y nosotros ante Él cantando y alabando su nombre. Al acabar, hicimos una marcha festiva encabezada por el Santísimo hasta nuestra parroquia. Fueron unas cuantas calles en las que la gente hacía fotos desde los autobuses y los coches, algunos salían de los bares, otros se unían. Hay muchos testimonios de personas que nos siguieron hasta la parroquia, y que en ese momento necesitaban sentirse amados y alegres, y sintieron que Jesús salía a su encuentro. Todos ellos preguntaron luego por distintos grupos y actividades de la parroquia para incorporarse. La Misión concluyó con una bendición en las escalinatas de la puerta de entrada, y a continuación hubo un concierto de Canta la Teva Fe en el espacio joven-cafetería Notemo.

El domingo por la mañana, para terminar el encuentro, tuvimos un momento intenso de alabanza donde dimos gracias a Dios por la experiencia vivida y las bendiciones que se derramaron, y también por la amistad y fraternidad entre nosotros. Este encuentro fue como un nuevo empujón de parte de Dios, una nueva caricia y un momento de fiesta y alegría en el que se encendió la llama del corazón que a veces, por el mundo que nos arrastra, se va consumiendo.

Señor Jesús, ¡qué bueno eres conmigo”. Así nos sentimos después de todo un fin de semana lleno de emociones, de alegría, de palabras susurradas al corazón…¡gracias, Jesús!